Una nueva jornada de violencia sacudió Michoacán este 23 de abril, luego de que grupos armados del Cártel Michoacán Nueva Generación protagonizaran ataques contra fuerzas federales. Durante al menos dos horas, se registraron intensos enfrentamientos en Apatzingán, donde los criminales también incendiaron tiendas de conveniencia y vehículos, paralizando actividades comerciales y del transporte. Las acciones se extendieron a varias regiones del estado, incluyendo Zamora, La Piedad, Morelia y Pátzcuaro, e incluso alcanzaron a Ocotlán, Jalisco.
Según informes preliminares, se quemaron al menos 15 vehículos, entre ellos tráileres y camionetas de carga. Las autoridades estatales confirmaron que estos hechos fueron una reacción directa a los operativos recientes realizados por fuerzas federales en contra de grupos delictivos. En Apatzingán, el conflicto se originó tras ataques armados a militares en las localidades de El Capire y El Alcalde. Las fuerzas de seguridad lograron repeler la ofensiva, pero los bloqueos y ataques posteriores generaron alarma y caos en distintas zonas del estado.
Como medida de seguridad, se suspendieron los servicios del transporte público y se cerraron todas las tiendas Oxxo en Apatzingán y Uruapan. Mientras tanto, la Secretaría de Seguridad Pública de Michoacán, junto con la Sedena y la Guardia Nacional, desplegó operativos para restablecer el orden y localizar a los responsables. Las labores se han reforzado especialmente en Zamora, Zacapu, Morelia y Apatzingán, puntos clave en la operación delictiva del cártel.
A pesar de los rumores sobre la posible detención de un líder criminal, ninguna autoridad ha confirmado oficialmente esa versión. La situación refleja la creciente tensión en la región, donde la lucha entre fuerzas del Estado y el crimen organizado continúa cobrando protagonismo, dejando a la población en medio del fuego cruzado.