Oaxaca, México. — La identidad cultural no se vende ni se reinterpreta sin consentimiento. Así lo dejó entrever el gobernador de Oaxaca, Salomón Jara Cruz, al anunciar que su administración evalúa emprender acciones legales por el uso del nombre del estado y la posible apropiación del diseño tradicional de huaraches por parte del diseñador Willy Chavarría, en colaboración con la marca Adidas.
El calzado, presentado recientemente en el Museo de Arte de Puerto Rico, lleva por nombre ‘Oaxaca Slip-On’ y fusiona el trenzado tradicional de huarache de Villa Hidalgo Yalalag —comunidad zapoteca ubicada en la Sierra Norte del estado— con una suela deportiva de estilo urbano, bajo el sello de la reconocida firma deportiva alemana.
Sin consentimiento ni reconocimiento
Durante su conferencia de prensa, Jara Cruz expresó su sorpresa e inconformidad:
“No sé quién sea Willy Chavarría… pero esos huaraches reinterpretados son propios de Oaxaca”, dijo al referirse al diseño. También señaló que el uso del nombre del estado sin autorización podría ser motivo suficiente para interponer una denuncia formal, por lo que se convocará a los artesanos de Yalalag para analizar una ruta jurídica conjunta.
La situación ha reavivado el debate sobre los derechos culturales de los pueblos originarios en México, una problemática que se ha hecho cada vez más visible en los últimos años ante casos similares de plagio y apropiación por parte de marcas internacionales.
Un patrón de apropiación
No es la primera vez que Oaxaca se enfrenta a esta clase de disputas. Casos anteriores como los de Isabel Marant (2015), Zimmermann (2021) y Carolina Herrera (2019) también involucraron diseños tomados sin consentimiento de comunidades indígenas como la mixe, la mazateca o la otomí, respectivamente.
Incluso el Gobierno Federal, a través de la Secretaría de Cultura, ha emitido diversas cartas a marcas como Shein, exigiendo respeto por los derechos colectivos de autor de los pueblos originarios. La postura oficial es clara: no se trata sólo de economía, sino de identidad.
“Se han despojado también de su identidad como grupo”, argumentó la Secretaría en una ocasión anterior, señalando los daños morales y simbólicos de estas prácticas.
Exigen ética y reconocimiento
Aunque Adidas y el diseñador no se han pronunciado públicamente sobre la controversia, desde Oaxaca se espera una respuesta que incluya diálogo, reconocimiento y reparación. Las comunidades, por su parte, han insistido en que el uso de sus símbolos no debe ser decorativo ni comercial, sino respetuoso y consensuado.
El caso de los huaraches “Oaxaca Slip-On” vuelve a poner en el centro del debate global un tema pendiente: la protección legal y cultural del conocimiento ancestral, en un mundo donde la moda aún se debate entre la inspiración y el plagio.