El Partido de la Revolución Democrática (PRD) enfrenta un futuro incierto tras no alcanzar el 3% de los votos en ninguna de las elecciones federales de 2024. A pesar de su alianza con el PAN y el PRI bajo la coalición “Fuerza y Corazón por México”, el PRD obtuvo apenas entre 1.9% y 2.4% de la votación en los diferentes cargos federales, lo que pone en riesgo su permanencia como partido político a nivel nacional.
En la contienda presidencial, la coalición abanderada por Xóchitl Gálvez logró un total de 1,058,609 votos, representando solo el 1.9% de la votación, según el corte del 93.5% de las actas del Programa de Resultados Electorales Preliminares (PREP). Este resultado es particularmente devastador, considerando que los votos nulos (1,323,209 sufragios) superaron los obtenidos por el PRD.
Para el Senado, el PRD alcanzó apenas 1,274,443 votos, lo que equivale al 2.3% del total. Esta cifra es insuficiente para asegurar legisladores de representación proporcional, dejando fuera a su dirigente, Jesús Zambrano, quien encabezaba la lista nacional. Sin alcanzar el umbral del 3%, el PRD se enfrenta a la pérdida de una representación significativa en el Congreso.
La situación es similar en la Cámara de Diputados, donde el PRD logró su mayor votación con 1,338,366 sufragios. Aun así, esta cantidad es insuficiente para mantener vivo al partido, ya que tampoco alcanzó el mínimo requerido del 3% para asignar diputaciones plurinominales. Este fracaso podría marcar el fin del PRD como una fuerza política relevante en el país.
En las elecciones federales de 2018, el PRD había logrado sobrevivir al alcanzar el mínimo de apoyos requeridos. En esa ocasión, la alianza con PAN y MC, encabezada por Ricardo Anaya, les dio un respiro con el 2.8% de la votación presidencial y resultados más sólidos en el Congreso. Sin embargo, la tendencia a la baja en las elecciones de 2024 parece señalar el ocaso del partido del sol azteca, que alguna vez fue la segunda fuerza política más importante de México.
