María del Rosario Díaz Cinco se tiene que ir. Todos los agravios que ha acumulado en contra de su propio personal del Instituto Municipal de la Mujer merece cárcel, pero el H. Cabildo le quiso dar una salida política y ahora el tema ya se debate en los tribunales judiciales.
Al igual que a muchos otros funcionarios, el alcalde Óscar Leggs Castro le dio la confianza y la oportunidad de que coordinara los trabajos del Instituto Municipal de la Mujer, pero resultó un fiasco, no tiene mínima idea de lo que es la defensa de las mujeres.
Hay que decirlo de manera clara, se tardaron en darle las gracias. La mejor obra de María del Rosario fue unir a todo su personal…pero en su contra. Y no les faltaban argumentos a quienes laboraban en la institución para denunciar de manera pública todos sus atropellos.
Aquí la lista de agravio de sus propias víctimas:
- Ausencia laboral de la Directora General incluyendo las Coordinaciones Delegacionales (bajo la consigna de más territorio menos escritorio, sin ser esto una realidad).
- No presentar un Plan de Trabajo, incumpliendo las metas establecidas en el Plan Municipal de Desarrollo 2021-2024.
- Uso indebido de vehículos oficiales.
- Violencia laboral (hostigamiento, acoso laboral, señalamientos discriminatorios, intimidación, exclusión, amenazas, intimidación, ataques verbales, ridiculización e infantilización del trato al personal y lo que es peor en estado de ingravidez).
- Deterioro de la infraestructura y abandono del Refugio.
- Opacidad en el manejo de recursos públicos.
- Deterioro de la imagen institucional.
- Negar servicios promovidos en el Resguardo y la Unidad de Atención Libre de Violencia (UALIVI).
- Obstaculización de protocolos de atención a mujeres en situación de violencia.
- Trato desigual y utilización del personal para fines negativos.
- Liderazgo autoritario e ineficaz.
- Indicaciones ambiguas.
- No proveer de manera oportuna y/o suficiente los insumos para desarrollar las actividades propias del Instituto, entre ellos la atención a la violencia contra las mujeres, contrastando con otros gastos superfluos.
- Utilización del Instituto para su beneficio propio.
- Reuniones no resolutivas.
- Evasión de responsabilidades.
- Falta de reconocimiento de las capacidades de su personal femenino, obstaculizando su empoderamiento.
- Uso y abuso de poder, incluida la grabación ilegal de conversaciones privadas para luego ser utilizadas como medio de presión e intimidación.
Bajo el pretexto de un amparo obtenido por la Justicia Federal, María del Rosario no se quiere ir del Instituto Municipal de la Mujer y en un acto arbitrario cambió todas las chapas de las oficinas e insiste en que sigue siendo la titular.
El Ayuntamiento de Los Cabos ahora no la quiere fuera sino que le ha denunciado de manera penal por los delitos de ejercicio ilícito del servicio público.
Le pidieron que se fuera por las buenas, ahora se va por las malas.
De su tragedia responsabiliza al Secretario General Ariel Castro Cárdenas y a la Sindica Municipal Alondra Torres García.Pero los más de 20 trabajadores del Instituto Municipal de la Mujer no pueden estar equivocados, cuentan con pruebas y con testimonios de su mal proceder.Por cierto MORENA partido al que pertenece, se esta tardando en desligarse de dicha funcionaria, no hay nada de que enorgullecerse, una tristeza.
