Un día después de las elecciones judiciales, la presidenta Claudia Sheinbaum calificó el proceso como un éxito rotundo, destacando que la participación ciudadana superó las expectativas. Según sus cifras, más de 13 millones de personas votaron, el doble de lo previsto, lo cual consideró “inédito, impresionante y democrático”, especialmente frente a la baja participación que anticipaba la oposición.
Sheinbaum destacó que la elección fue austera y transparente, con campañas centradas en redes sociales y evaluaciones previas por comisiones del Ejecutivo, Legislativo y Judicial, lo que garantizó que los aspirantes cumplieran con los requisitos constitucionales.
Además, la presidenta criticó fuertemente al actual Poder Judicial, al que acusó de corrupción, nepotismo y de proteger privilegios. Señaló que 169 personas vinculadas a la delincuencia organizada han recibido cambios de medida judicial en su mandato, incluyendo liberaciones y amparos, y denunció decisiones de la Corte que, según dijo, obstaculizan el trabajo del Legislativo.
Finalmente, rechazó las afirmaciones de que hubo campañas costosas, reafirmando que el proceso fue austero y apegado a derecho.