El presidente Andrés Manuel López Obrador anunció este martes que la relación con la Embajada de Estados Unidos en México ha entrado en una “pausa” tras los recientes comentarios del embajador Ken Salazar sobre la reforma al Poder Judicial impulsada por el mandatario mexicano. Estas declaraciones se suman a las críticas realizadas también por la embajada de Canadá, lo que ha generado tensiones diplomáticas con ambos países.
Durante su conferencia mañanera, López Obrador subrayó que las relaciones con las embajadas de Estados Unidos y Canadá se mantendrán en pausa hasta que se realice una aclaración o disculpa por parte de ambos gobiernos. El presidente enfatizó la importancia de que las decisiones tomadas por un gobierno legalmente constituido en México sean respetadas, y que cualquier injerencia en los asuntos internos del país es inaceptable.
El mandatario dejó claro que la soberanía de México no está en discusión y que no permitirá que ninguna nación extranjera influya en las decisiones políticas internas del país. López Obrador cuestionó las críticas de Ken Salazar, afirmando que no se permitirá ninguna violación a la soberanía mexicana, especialmente en relación con la reforma judicial.
Las declaraciones de Salazar, emitidas el pasado 22 de agosto, señalaban que la elección directa de jueces representaba un riesgo para la democracia en México. Esta postura fue acompañada por la preocupación expresada por el embajador canadiense, Graeme C. Clark, quien destacó que la reforma judicial podría afectar la estabilidad del marco jurídico, un aspecto crucial para la confianza de los inversionistas extranjeros en el país.