● 9 de cada 10 delitos sexuales contra infancias no se denuncian.
● Más del 80% de las mujeres privadas de la libertad son madres y enfrentan violencias que las vulneran aún más.
● 7 de cada 10 víctimas de trata de personas son mujeres y niñas.
● 1 de cada 4 niñas han sufrido abuso sexual.
● Más del 60% de sobrevivientes que atendemos en Reinserta son niñas y adolescentes.
● Desde Reinserta…. Hacemos un llamado a no permitir que la violencia siga siendo el destino de nuestras niñas y adolescentes. Exigimos justicia, protección y políticas reales que garanticen su seguridad y bienestar. ¡Es momento de actuar!
Ciudad de México, a 11 de Marzo de 2025. En el marco del Día Internacional de la Mujer, Reinserta llevó a cabo una serie de actividades para visibilizar y acompañar a mujeres privadas de la libertad y niñas y adolescentes sobrevivientes de violencia. A través de estas acciones, se buscó generar espacios de reflexión, expresión y comunidad, fortaleciendo la resiliencia y el empoderamiento de las participantes.
Durante la semana del 8 de marzo, Reinserta realizó diversas actividades dentro y fuera de los centros penitenciarios, impactando a cientos de niñas, adolescentes y mujeres. Algunas de las principales acciones fueron:
Evento 6M Voces inVISIBLES en colaboración con La Cana:
El Día Internacional de la Mujer en el Centro Federal de Readaptación Social 16 fue un día lleno de emoción, encuentro y sororidad. Durante esta jornada, más de 750 mujeres privadas de la libertad y sus hijos vivieron un espacio de expresión, conexión y fortalecimiento emocional que les permitió, por un momento, salir de la rutina y recordarse a sí mismas como personas valiosas, creativas y resilientes.
A lo largo de siete módulos, se llevaron a cabo actividades que despertaron sonrisas, abrazos y complicidad: talleres de yoga, flow, cartas, pulseras, macramé, acuarelas, stand-up, danzaterapia, poesía y arteterapia. Cada una de estas experiencias no solo promovió la creatividad, sino que se convirtió en un puente para la conexión, tanto entre las mujeres como con quienes nos sumamos desde afuera con la convicción de que estos espacios de expresión transforman vidas.
Las palabras, los gestos y las risas compartidas fueron testigos de un día en el que el arte, la música y el diálogo se convirtieron en herramientas de resistencia y sanación. En los paneles de discusión, las mujeres privadas de la libertad tuvieron la oportunidad de hablar sobre salud mental, resiliencia y sororidad, temas que forman parte de su día a día dentro del centro federal. Esto permitió reflexionar y validar emociones que muchas veces quedan atrapadas en el silencio. Mientras tanto, los niños y niñas disfrutaron de un espectáculo de burbujas que llenó de magia y asombro su día, y que, poco a poco, también conquistó a las mujeres, quienes terminaron participando y dejándose llevar por la ilusión del momento, conectando con su niña interior en un espacio de libertad dentro de los muros.
Este evento no solo contó con actividades, sino con personas que pusieron el corazón en cada momento. La cantante Paty Cantú ofreció un concierto lleno de emoción y significado para las mujeres privadas de la libertad. En un momento especial, incluso subió al escenario a una de sus fans, quien tuvo la oportunidad de cantar a su lado, haciendo de la presentación una experiencia aún más memorable. La comediante Ana Julia Yeye nos recordó, a través de su stand-up, el poder sanador de la risa, regalándonos instantes de alegría genuina. Carol H. Solís inspiró a las mujeres durante el taller de carteles, alentándolas a plasmar su voz, sus experiencias y sus ideales. Estos carteles fueron posteriormente llevados al contingente de Reinserta, donde se marchó con ellos como símbolo de sus luchas y esperanzas.
El cierre de la jornada fue tan poderoso como el día mismo: una marcha simbólica dentro del centro penitenciario, en la que las mujeres caminaron juntas, alzando la voz por sus derechos, por sus sueños y por un futuro mejor.
Más allá de las actividades, este evento dejó algo aún más valioso: vínculos, recuerdos y la certeza de que, incluso en los lugares más difíciles, la sororidad y la esperanza encuentran su espacio para florecer.
